El tema podría ser que te amo, pero me parece muy soso; aún no te amo.
Podría ser el amanecer, pero la verdad es que no lo entiendo, en la misma época puede ser frío y caluroso, depende de los restos de la noche anterior.
El tema podría ser mi familia, pero si les escribo nunca leerán mis cartas, no me leen, no se toman el tiempo, quizás por que no tienen computadora.
El tema podría ser la noche, pero solo significa insomnio y mientras duermo pasan cosas interesantes pero no me acuerdo.
El tema podría ser mi amigo, aquel que da mucho de que hablar, pero mejor no; se ofendería si le robo protagonismo.
Religión o política... ¿Para que me juzgues y después hacer una replica? No, no estoy escribiendo la carta de nunca acabar.
Temas varios son el mar, el gimnasio, el antro, pero de todos tengo malos recuerdos y hacer dramas ya nos pasó de moda.
Quizás una copa de vino tinto me abra la mente, o me obligue a hacerme justicia por mi propia mano.
Abre los ojos y dime si el tema podría ser que hoy no hay tema, que no hay tópico que describa lo felices que estamos viviendo…
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