viernes, marzo 26, 2010

Señora Sinceridad


Buenas tardes joven, ¡no me cierre la puerta por favor!
Vengo a ofrecerle mis servicios, me gustaría ser su empleada de planta,
Ya he trabajado con algunos de sus amigos, puede usted pedir informes.

Mi obligación es informarle que una vez adquirido este servicio,
Difícilmente se podrá deshacer de el,
Queda garantizada la satisfacción del cliente o le devolvemos su dinero.

Como parte de mis servicios me comprometo a:

Le ofrezco desayuno en la mañana,
Limpieza al cuarto,
Barrer el frente de su casa ¡Vea toda la basura acumulada en años!
Le daré pastillas para la garganta, no tendrá más problemas de comunicación,
Cuando alguien lo ataque usted me llama, respiramos juntos y usted responde con prudencia ¿OK?

He de advertirle que no podré estar aquí todo el tiempo,
En ocasiones soy despreciada por mis jefes,
Me dan vacaciones no pagadas y fingen que no me conocen;
Pero no se preocupe, no lo tomaré a mal,
Se que hay en usted una gran persona (un poco desorientada),
Pero que ya no tiene espacio para el dolor.

Haré honor a mi nombre; no le garantizo que vivirá como rey,
Pero si rodeado de verdaderos amigos y de personas que compartirán su felicidad con usted.

Espero que se decida contratar mis servicios,
Que se de cuenta que aunque me requieren en muchas partes,
Es aquí donde quiero estar.

Así que usted dirá de que lado de la recamara dormiré y cuando comenzamos...

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